Cuando traemos un cachorrito a casa tenemos la tentación de tratarle como a un ser humano, y no podemos olvidar nunca que son animales y que hay que educarlos como animales, sin querer esto decir que no los podamos querer y darles grandes cantidades de afecto. Si no los adiestramos desde cachorros podemos crear, sin querer, una mascota tirana que se convierta en el amo de la casa. La hora de la comida y los alimentos son básicos en el proceso de adiestramiento.Por una parte está la rutina y la disciplina que se les ha de imponer a la hora de comer. Una de las primeras reglas de convivencia que se han de imponer al animal es que ha de comer siempre después de sus dueños, respetando así la jerarquía del hogar. Tienen que aprender que los humanos son los dueños y que ellos están subordinados. Tienen que seguir una estricta rutina con respecto a las comidas y no hay que darles de comer cuando lo pidan. Sólo cuando los dueños hayan comido y recogido. Para que estén sanos y fuertes es necesario que coman alimentos para animales de calidad como por ejemplo Royal Canin, Proplan, Mi Mascot, Pedigree, etc ya que estos lo ayudan en su desarrollo.
Es importante recalcar que la comida como premio es una de las bases de los procesos de adiestramiento. Para premiar a los perros por su buena conducta existen unas golosinas especiales para mascotas. No se deben dar golosinas para humanos, ya que son perjudiciales, incluso tóxicas, para su salud. Se les puede premiar también con pequeños trozos de comida que a ellos les guste también. Pero nunca se les debe dar comida cuando los dueños están comiendo, ya que se acostumbran, ni trozos de huesos, que son peligrosos para ellos y se pueden atragantar o dañarse el sistema digestivo.
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